Guardando las armas (Boston 2012)

Estimados, acá estamos con la Pauli, recién almorzados y prestos a tomar una pequeña siesta. Mañana partiremos rumbo a los buses, que en esta ocasión quedan a una distancia considerablemente mayor a la de 2009, con la esperanza de que al menos algunas nubes curiosas se animen a aparcerse por nuestro recorrido. 
Lo del calor ya es un hecho, hoy realizamos un trote por los ultimos 2k para que la Pauli los conociera. Fueron 30' con 23ºC y nuboso, llevadero, pero basto que abriera el cielo para que la plancha se te viniera encima. La organización ha realizado dos medidas para fomentar la baja de corredores: 1. Quien no inicie se le respeta el cupo para el 2013, y 2. La meta cierra a las 18:00 hrs con que los más lentos pueden optar a medalla sin fundirse por apurar. Acá nadie entiende (de los que no son runners) con qué afán se parte a las 10:00 am. Ellos no saben de los compromisos comerciales de TV. A mi también me encantaría que adelantaran la partida pero no va a ser. 
Lo simpático dentro de todo es que ahora mis mañas pre-maratón figuran secundariamente y estoy hasta relajado (si al relajo de un condenado se le puede llamar asi). Otra cosa es que quizás, por vez primera, me vea forzado a correr a torso desnudo (chicas favor no babear, jaja). De hecho he colocado ganchos extras en mi short para un movimiento más fluido (el chip viene detrás del numero de competencia, tal como en Marine Corps el 2010). Me compré una crema Livestrong pfs50 que dura 80' contra agua la que me embadurnaré copiosamente.
Ya amigas y amigos mios, les pido que nos manden sus mejores energías y, a quienes crean, récenle al Caballero para que envíe unas piadosas nubes por Massachusetts. El mejor consuelo me lo dio el Seba, esta carrera no se va a olvidar nunca y formaremos parte de su historia. Podremos decir: "y sí, yo corrí la segunda versión más calurosa y jodida de los 116 años en la historia de Boston", que el desastre del 2003 que tanto hablan en mi club no existió, de hecho el record fue en 1976. Desastre... ¡Ahhh, por qué mencione esa palabra! ¡No me vaya a escuchar el sol y se ensañe! Un gran abrazo y nos vemos después para conversar de esta aventura.

Adrián





15 de Abril, Boston, MA

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